Esto supongo que también nos habrá pasado a todos alguna vez, nos dicen que nos traigamos algo para la clase siguiente y todos nos imaginamos que haremos con ello, para que podrá ser y al día siguiente es otra cosa totalmente distinta a la imaginábamos, y a veces nos puede gustar puesto que no habíamos pensado en ello y otras veces puede que no nos guste puesto que creíamos que íbamos a hacer otra cosa distinta y que nos gustara más.
Como ya he dicho, a veces nos puede sorprender lo que hagamos porque no nos habíamos parado a pensar en ello, pero en otras ocasiones nos desilusionamos como podemos ver en la imagen: la profesora les ha dicho que se traigan pinzas de la ropa, y todos van a clase al día siguiente con las pinzas y pensando que harán con ellas; cada uno se imagina una cosa distinta para hacer con ellas, pero ninguno pensó en lo que al fin y al cabo harían, y todos se desilusionan porque han hecho algo que no les entusiasmaba para nada, algo que se queda pequeño para tanta creatividad como la que tienen los niños.
También podemos observar que a los niños no se les ha dejado hacer lo que ellos crean conveniente para su papá, sino que todos van a casa con el regalo que le ha dicho la profesora que hagan y encima todos tienen el mismo regalo.